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martes, 13 de diciembre de 2011

Lo absurdo

Se levantó por la noche. Por alguna razón extraña, como por una fuerza diminuta y poderosa abrió los ojos de repente. Y con el aleteo de sus pestañas cien mariposas echaron a volar en alguna parte. Pero eso ella no lo sabía todavía. Abrió los ojos de repente, estaba tendida boca arriba en la cama y las imágenes del sueño la bombardearon como dulces pellizcos en el antebrazo. Una jungla de noche, yacía recogida entre matorrales y ramas en una isla levemente iluminada por la luna. Miraba fijamente los dedos de su pie descalzo, con una expresión suave y relajada. Su cuerpo quebradizo se doblaba bajo un vestido de gasa gris, las gotas de rocío paseaban temblorosas. Un león se acercó en dos pasos por su espalda e indiferente escuchó cómo le susurraba en la nuca que todo era una trampa.
Se levantó por la noche. Posó los pies descalzos en el frío parqué. Tenía que hacer algo, pero no recordaba el qué. No debía ser importante, pensó. Veinte segundos, calculó. Veinte segundos los que tardó Serge en pasar por su mente. Otras mañanas apenas abiertos los ojos, él ya estaba ahí. 'Monopolizas cada uno de mis pensamientos', le dijo un día, y provocó esa media sonrisa de las cosas inesperadas y un tierno rubor en su rostro. Vivía de recuerdos, imaginaba a Serge una vez y otra. No podía evitarlo, por ello hasta veinte segundos le parecieron mucho. Se quitó el camisón y lo dejó apoyado en la silla del tocador, mientras se sentaba frente al espejo y sujetaba un moño improvisado con una goma azul. Permaneció ahí, inmóvil ante la imagen que le devolvía el cristal. Qué ojos tan cansados, qué labios tan tristes. Y qué sólos.

Hay veces en la vida que te das cuenta de que eres algo eterno. Hay momentos, como cuando te levantas por la noche y en la oscuridad de la habitación sientes el frío del suelo en tus pies descalzos, y te concentras sin querer en los sonidos que vienen de la calle, y de la habitación, hasta que sólo oyes los de tu propio cuerpo, o como cuando caminas y ves más allá de las personas que se cruzan, incluso más allá de los tejados y del cielo. Hay momentos en que te das cuenta de que eres eterno cuando miras en los ojos de alguien,

domingo, 27 de noviembre de 2011

La aparariencia: reeditado

Foto Millais:..... El hombre de hoy flota a la deriva sin convicciones, sin firmeza, sin horizontes.. El gran vació moral que le caracteriza le esta llevando a  convertirse en el peor enemigo de si mismo, atenazado por las ambición, las riquezas, la fama, y el afán de aparentar. Sin esa necesaria mirada serena y profunda hacia el interior de nosotros mismos, cada vez seremos más vulnerables y fáciles de manipular mentalmente, por el entorno. El perfeccionismo  individual no consiste en hacer cosas extraordinarias sino en hacer bien las cosas ordinarias. (  cuanto más se tiene más se desea, y en vez de llenar, abrimos un vació.) Feliz semana

La Razón:

¿Creeis que hemos dado demasiada importancia a la  RAZÓN, ?no es mejor estar en paz convivir alegremente no es muchisimo más importante que saber quien tiene razón, y en segundo lugar porque cada diez veces que decimos " To tengo razón" nueve lo que estamos es imponiendo nuestro egoismo nuestro punto de vista... sin molestarnos siquiera en tratar de ver el del contrario.¿ Que opinais?